De Hans-Georg Gadamer
Editorial: Paidós
Cantidad de páginas: 150
Lugar de publicación: Barcelona
Fecha de publicación: Julio de 2001
El bello título de este libro se corresponde con su contenido. Se trata de seis textos escritos entre 1935 y 1994, en los que el autor aborda desde diferentes ángulos los orígenes del pensamiento sistemático, que a diferencia de la tradición más difundida, sitúa en Heráclito. Los ensayos son “Sobre la transmisión de Heráclito” (1974), “Estudios heraclíteos” (1990), “El atomismo antiguo” (1935), “Platón y cosmología presocrática” (1964), “La filosofía griega y el pensamiento moderno” (1978), “El concepto de naturaleza y la ciencia natural” (1994).
En este último trabajo el autor registra que “la filosofía griega fue puesta al servicio de la teología cristiana”, de donde “el progreso de la ciencia natural moderna tenía por entonces menos lugar en las universidades (…) Y así, bajo el progreso técnico de las ciencias, la filosofía de la naturaleza se vio progresivamente expulsada de la conciencia filosófica. Esto sigue siendo así todavía hoy”.
Gadamer hace un conciso recorrido de este conflicto y concluye que “la filosofía de la naturaleza fue olvidada rápidamente (quizá demasiado rápidamente) a lo largo del siglo XIX, bajo el impulso de la investigación científica (…) la conocida distinción entre ciencias de la naturaleza y ciencias del espíritu se convirtió en un tema recurrente, y como ‘teoría del conocimiento’, se quiso fundamentar a las ciencias filosóficamente”.
Ante este nudo de singular vigencia actual, es oportuno recurrir a Heráclito, quien ya sabía que “Este mundo, que es el mismo para todas las cosas, no fue hecho por ningún dios ni por ningún hombre. Siempre fue, es y será un fuego eternamente vivo, que se enciende con medida y se apaga con medida”.